Por aquí una adicta a las hierbas, y no a las que se fuman jejeje. Desde hace años vengo desarrollando una especial afición a los tés e infusiones, y aunque en anteriores ocasiones os hablé de los tipos de té, hoy vengo a enseñaros qué infusiones podemos tomar según el mal que se padezca. Recordar que para sacar el máximo provecho de éstas hierbas, es muy importante que cuidemos la forma de preparación y el tiempo de reposo.
Infusiones para dormir
Afortunadamente existen infusiones para dormir bien, relajarte en el momento de ir a la cama y así descansar más profundamente. La más popular es la Valeriana, aunque también son de gran ayuda los tés de tilo, el romero, la lavanda, el toronjil, la menta, la pasiflora y la hierba luisa.
Infusiones para relajarse
Para hacer más llevaderos esos momentos de estrés o calmar esos nervios antes de un examen nada mejor que marcarnos una buena infusión con la que recuperar la tranquilidad. La pasiflora, el ginseg, la hierbaluisa, la planta de san juan, la valeriana, la melisa y la tila son las más conocidas. De hecho, la tila es una de las infusiones más utilizadas para éstos casos.
Infusiones para las digestiones
Para combatir la pesadez de una comida muy copiosa o bien facilitar aquellas digestiones se recomienda tomar infusiones de boldo, hinojo, jengibre o manzanilla. A mi personalmente me gustan mucho las infusiones de manzanilla y anís, procuro tomar una detrás de cada comida.
Infusiones para adelgazar
Nadie se toma una infusión y adelgaza milagrosamente, pero nos referimos a infusiones que faciliten la digestión, el tránsito, la retención de líquidos...Entre ellas encontramos el té rojo (conocido por su poder quemagrasas) té verde (capaz de eliminar líquidos) infusiones a base de canela, té roiboos y cola de caballo.
Y vosotras, ¿soléis tomar infusiones?¿Cuál os gusta más?